La Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso, Desmotadores de Algodón y Afines de la República Argentina, popularmente conocida como Aceiteros, comenzó ayer un conflicto con las cerealeras luego de que las empresas se negaran a ofrecer una recomposición salarial en el marco de las paritarias de la sector.
"Los representantes patronales de las cámaras CIARA, CIAVEC y CARBIO informaron que su oferta salarial es cero. Esto es, se niegan a negociar cualquier tipo de aumento", especificaron desde la organización que comanda Daniel Yofra.
La discusión se dio en el marco del cumplimiento de la cláusula de revisión prevista para el mes de agosto y que formó parte del acuerdo paritario firmado por las partes el pasado 30 de abril.
Aceiteros presenta en cada discusión salarial un reclamo que no está expresado en porcentaje sino en el cálculo sobre lo que necesita un operario para cubrir el Salario Mínimo, Vital y Móvil, según su definición en el artículo 14 bis de la Constitución Nacional y artículo 116 de la Ley de Contrato de Trabajo. Concretamente le piden una ingreso inicial que asegure a los trabajadores "alimentación adecuada, vivienda digna, educación, vestuario, asistencia sanitaria, transporte y esparcimiento, vacaciones y previsión".
En esta oportunidad las cámaras empresarias, CIARA, CIAVEC y CARBIO, argumentaron que el cálculo de actualización salarial se debe hacer en función de la inflación pasada y que a su juicio no corresponde ningún aumento.
"Se trata de las mismas patronales del sector agroexportador que acumularon ganancias extraordinarias durante la última década, profundizadas durante el gobierno de la alianza Cambiemos del ex presidente Mauricio Macri, cuyas actividades fueron declaradas esenciales durante la crisis sanitaria y que acaban de ser beneficiadas por importantes bajas en las retenciones, diferenciadas para las industrias del sector", dispararon desde el sindicato.
Y fueron más allá: "Se trata de la misma CIARA-CEC que presionan al gobierno en los canales de televisión con no liquidar los dólares que la economía nacional requiere en un contexto de crisis sanitaria, económica y social si el gobierno no aprueba en el Congreso de la Nación un proyecto de ley a medida de las empresas del sector".
Como respuesta, Aceiteros definió el estado de asamblea y alerta y a iniciar el trabajo a reglamento "a la espera de las inmediatas acciones a tomar".